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16 de diciembre de 2020
El dato se desprende del Barómetro de Empresas Inmobiliarias elaborado por Ejeprime y Gesvalt, un informe que muestra la visión del propio sector a partir de una encuesta a 300 compañías vinculadas con esta industria.
La segunda edición del Barómetro de Empresas Inmobiliarias en España que elabora todos los años EjePrime y el grupo editorial Cinnamon News a través de una encuesta a las empresas y entidades que conforman el tejido del real estate en España, contó en su segunda edición con la colaboración de Gesvalt.
El objetivo del estudio es obtener una visión general sobre las empresas y entidades del negocio inmobiliario, sobre todo las grandes tendencias que se dan en el mismo.
También pone en valor la relevancia y dinamismo que tiene el negocio inmobiliario y su capacidad de reacción a los retos que tiene por delante.
Con más de 300 participantes, el estudio recoge las opiniones a julio de 2020, cuando las circunstancias económicas y sanitarias como consecuencia de la pandemia no eran tan pronunciadas como en los meses posteriores.
En la presentación online, a cargo de Sandra Danza, directora general de Gesvalt, y Marc Vidal, director de Ejeprime, se brindaron las claves del informe.
Según se desprende de los resultados del estudio, casi la mitad de las empresas del sector confían en una rápida recuperación y cree que el negocio se recuperará del impacto del Covid en 2021
Otro de los datos que pone de manifiesto el estudio es que pese a la pandemia 4 de cada 10 empresas prevén que el negocio aumente pese a la crisis del coronavirus.
El Barómetro ahonda también en la confianza de las empresas en un contexto de la caída de la economía, teniendo en cuenta que el inmobiliario ha sido de los sectores que más impacto tuvieron en la crisis anterior. En este sentido, 8 de cada 10 creen que la confianza es regular o baja, y un número similar de compañías han tomado decisiones estratégicas importantes a pesar de la pandemia
El informe revela también que de cara al cierre del ejercicio solo el 40% de las empresas cree que aumentará su facturación. En términos generales, el 40% de los operadores del sector prevé que su desempeño retrocederá en 2020. Respecto al empleo, el 19% de las empresas cree que tendrá que reducir su plantilla este año.
El documento recoge también la opinión de los empresarios respecto a la evolución de los precios en el Real Estate. Destacamos cuatro datos clave:
Sandra Daza apunta que queda poco recorrido temporal para saber hasta dónde va a llegar el ajuste. “El impacto es muy desigual y eso da muestras de un mercado inmobiliario sano, a diferencia de lo visto en 2008. En el barómetro se ve como hay activos que han salido reforzados por el modelo de negocios que alberga, como es la industria y la logística. En cuanto al residencial, será de los menos impactados aunque también se llevarán a cabo ajustes. Sin embargo, cree que van a encontrar ajustes muy exigentes y muy claros en activos ligados al retail, al hotelero y al ocio. Es pronto para saber cuán grave será el impacto pero siempre quedarán los activos prime, donde no variará mucho el ajuste”.
Por su parte, Marc Vidal señala que es en las viviendas de segunda mano donde se puede llegar a sentir un mayor impacto, según las respuestas de las empresas del sector. “Todo depende de la oferta y la demanda. La obra nueva que sale hoy al mercado son activos producidos hace año y medio o dos años, por eso no se va a ver grandes ajustes de precio. Lógicamente, en segunda mano sí y tendrá que ver qué tipo de activos son”.
Sobre las medidas de la Administración para regular los precios, Sandra Daza indica que primero hay que esperar a ver si se aprueba tal y como está concebido, y que desde un punto de vista de intervención del mercado, no es partidaria en general.
Por lo tanto, “siendo un objetivo muy loable el que busca, cree que hay que intervenir desde la palanca de la oferta y, en ese sentido, cree que hay que aumentarla. La administración pública tiene que ser el motor de una oferta de vivienda de calidad para conseguir el efecto que se desea. La limitación de los precios no va a conseguir el objetivo que busca, generara una contracción de la oferta y, además, es posible que genere un mercado negro que ya se ha visto en otros países”.
Marc Vidal apunta que, según los datos del barómetro, más de la mitad de las empresas critican ese intervencionismo del gobierno y la gran burocratización del sector inmobiliario para desarrollar su actividad.
Frente a los cambios fiscales de las socimis, Daza recuerda que estas sociedades nacieron como un vehículo muy necesario en el sector y son un modelo probado en otros mercados que permiten el acceso de pequeños inversores en el sector inmobiliario. “Penalizar fiscalmente a las socimis tendrá un impacto moderado”, indica.
Sandra Daza señala que todos los actores del sector están revisando de alguna manera las estrategias corporativas y, en muchos casos, se están enfocando en dar respuesta a esas necesidades de optimización y automatización. “Los nuevos empleos y las nuevas necesidades del sector van a estar muy ligadas a este nuevo escenario”.