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22 de marzo de 2021
El sector de la energía es un auténtico mercado en ebullición y los activos vinculados a las renovables se muestran como los principales beneficiarios del flujo de capital.
Las infraestructuras de energía están actualmente en el punto de mira de las estrategias de inversión. El imparable avance hacia un modelo de producción bajo en carbono y la cada vez mayor participación de las empresas de petróleo y gas en los proyectos de generación de energía verde, sitúan a las renovables en la alternativa con mayor potencial de atraer inversiones.
Los planes de descarbonización de los diferentes gobiernos y la necesidad de impulsar estrategias y planes que ayuden a mejorar el medio ambiente y la lucha contra el cambio climático han puesto en el punto de mira la inversión en proyectos de energías renovables. Este segmento se ha convertido en uno de los más relevantes en cuanto a su actividad y desarrollo económico, por lo que se prevé que se activen multitud de operaciones corporativas en este ámbito. En este sentido, Gesvalt ha liderado y ha desarrollado una gran experiencia en el asesoramiento en proyectos energéticos en los últimos años.
Su experiencia en este ámbito abarca desde el asesoramiento y valoración en procesos de adquisición o desinversión en el segmento de la energía, a la valoración de parques eólicos, plantas fotovoltaicas y de cogeneración para las principales gestoras de energías renovables como son BP Solar, Siemens Gamesa o Forestalia entre otras.
Estos proyectos le han permitido a la compañía conocer en profundidad la relevancia de los activos relacionados con las energías renovables apoyando a los clientes en el asesoramiento y valoración de los activos a la hora de realizar una inversión.
Algunos de los elementos clave que apuntamos desde Gesvalt como expertos en asesoría y valoración para proyectos energéticos, son los siguientes:
Los criterios ASG (ambientales, sostenibles y de buen gobierno) están presentes, sin duda, a la hora de planificar e implementar una estrategia inversora. Para adecuarse a estas premisas, las compañías están estableciendo medidas contra el cambio climático, el afianzamiento del reciclaje y la economía circular, así como aquellas dirigidas a promover una movilidad sostenible y hacer posible así la transición energética.
Además, la búsqueda de los inversores de activos socialmente responsables para sumar a sus carteras, junto al buen comportamiento de este tipo de productos sostenibles durante 2020 también está determinando el peso de los criterios ASG en las estrategias de inversión.
El compromiso de alcanzar la neutralidad climática de la Unión Europea para 2050 está orientado a cambiar los hábitos energéticos del viejo continente.
Las medidas que acompañan esta política incluyen la diversificación de las fuentes de energía, garantizar la seguridad energética, la mejora de la eficiencia energética, la reducción de la dependencia de las importaciones, la disminución de las emisiones, descarbonizar la economía, promover la investigación en tecnologías de energías limpias y aquellas que contribuyen a la reducción de las emisiones de carbono, entre otras.
Inversores y fondos están siempre predispuestos a rastrear el mercado de activos para diversificar las carteras de sus clientes, y en este contexto las energías renovables se han convertido en una muy buena oportunidad.
Las grandes petroleras también están entrando en el sector de las energías limpias con el desarrollo de proyectos de cogeneración, eólicos y solares.
Parece que los activos vinculados a las energías renovables van a seguir experimentado una mayor demanda por parte de los inversores. Las perspectivas de rendimiento a largo plazo, el flujo de caja estable y predecible, la presión social por energías más limpias por parte de las generaciones más jóvenes y el deseo de participar en inversiones más responsables están entre los principales motivos de este impulso.
La conciencia pública sobre el origen de la energía y su uso eficiente ha aumentado, así como la presión de la generación millennials por la demanda de energías limpias. Con la amenaza a largo plazo del cambio climático en el centro de la atención pública y en la agenda de gobiernos, el despliegue de energías limpias se suma a las demandas de acciones imprescindibles para combatir el cambio climático.
Las condiciones climáticas y orográficas de cada país determinan el potencial y el tipo de instalación de energía renovable más rentable. Por la cantidad de horas de sol al año, el sur de Europa ha desplegado la energía solar, mientras el norte del continente donde prevalece el viento, se ha decantado por la energía eólica offshore y onshore.
La financiación de proyectos de energía verdes contribuirá a cumplir los Acuerdos de París y la necesaria descarbonización de la economía. Los activos vinculados a las energías limpias están más predispuestos a las subvenciones gubernamentales, y por lo tanto incrementarán aún más su viabilidad financiera.
Las acciones de apoyo de los gobiernos ayudarán a expandir las nuevas tecnologías, no solo de producción sino también de almacenamiento.
Las energías renovables son inagotables. Los avances tecnológicos de las últimas décadas han disminuido considerablemente los costes de producción y mantenimiento de centrales eólicas y solares y han acortado los tiempos de amortización de las instalaciones, aumentando la competitividad de las energías limpias frente a las de combustibles fósiles y nucleares.
Estamos en un momento especial en el que si los gobiernos, los inversores, las empresas energéticas y los gestores especializados trabajan juntos podrían mostrar el camino hacia un futuro más ecológico y sostenible.
Además de los servicios de consultoría y valoración en procesos de inversión y desinversión en este ámbito, así como la valoración de infraestructuras de energías renovables, Gesvalt asesora, como experto independiente, a empresas generadoras de energía, distribuidoras e ingenierías y fabricantes de componentes y equipos.
Trabaja tanto para los sectores del gas y petróleo, como para los de energías renovables, solar, eólico, hidroeléctrico, y cogeneración.
Realiza valoraciones industriales en operaciones de refinanciación, en procesos de PPA (Purchase Price Allocation), valoración de marcas, empresas y derechos reales y en mejora de las condiciones de la póliza de daños materiales, evitando un posible infraseguro.
El papel de Gesvalt en procesos de compra-venta ha sido y es clave en multitud de operaciones, sirviendo su opinión como base de negociación y toma de decisiones.
