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13 de noviembre de 2023
En un mundo donde la responsabilidad social corporativa está cada vez más bajo escrutinio, el estado de desempeño extrafinanciero es ahora una obligación legal para ciertas organizaciones.
Cada vez más empresas publican un informe extrafinanciero cada año, también llamado “informe de sostenibilidad”. Y esto se debe a varias razones: restricciones legales con la aparición de nuevas obligaciones para las empresas (como la CSRD), la exigencia de transparencia y responsabilidad de las empresas en su gestión ambiental, social y de gobernanza, la presión de los grupos de interés, y más. El EINF nace para dar respuesta a estas demandas con el objetivo de mostrar los resultados de su política en materia de responsabilidad social corporativa.
El EINF es un anexo al informe de gestión de la empresa. Este documento recopila información relativa al enfoque de responsabilidad social corporativa de la organización, y por tanto del impacto ambiental y social, así como su modo de gobernanza.
Obliga a las empresas a publicar un informe anual sobre sus actividades, verificado por un organismo independiente y externo.
El EINF comparte información sobre los aspectos sociales, societarios y ambientales relacionados con las actividades que desempeña la organización. También especifica cuáles son las políticas llevadas a cabo para gestionar los riesgos identificados en estos ámbitos.
El reporte está dirigido a todos los grupos de interés de la empresa, desde los clientes hasta los proveedores, pasando por los socios comerciales y los inversores.
Este documento se ha convertido en un pilar de la política de responsabilidad social corporativa de una empresa.
Para elaborar un informe EINF (Estado de Información No Financiera), se analizan los departamentos de la empresa y recopilan los datos necesarios. El objetivo es presentar información clara y relevante a los grupos de interés.
Pasos para elaborar un EINF
Aquí puedes ver nuestro caso de éxito de informe EINF con la multinacional Kronospan.
Los Informes EINF exigen un contenido obligatorio que incluye información detallada sobre:
Formato y presentación
Con la CSRD, los requisitos se harán aún más estrictos, con estándares más detallados y la obligación de digitalizar la información.
Además de la necesidad de cumplir los requisitos normativos, este reporte amplía la información de aspectos no reflejados en los indicadores financieros, pero que impactan directamente en el valor de la empresa.
Pero más allá de los aspectos regulatorios, este documento presenta muchas ventajas para las organizaciones al aportar una visión más global del riesgo, ayudando al inversor y consumidor en la toma de decisiones.
El desempeño general de estas organizaciones ya no puede evaluarse únicamente sobre la base de indicadores financieros y económicos. Su desempeño también debe evaluarse en relación con los llamados criterios extrafinancieros, aquellos relacionados con la acción ambiental, social y societaria de la empresa. Para ello, se creó un documento que facilita la comunicación sobre esta temática dirigida a los grupos de interés de la empresa: el EINF.
El documento aporta más transparencia al enfoque de la responsabilidad social. De hecho, la empresa podrá ofrecer más claridad y confianza a sus grupos de interés en materia de RSE (empleados, accionistas, clientes, proveedores, comunidad local, etc.). En términos generales, se trata de una herramienta de comunicación muy efectiva, ya sea a nivel interno (dirigido a empleados o futuros empleados) o externo (para atraer y fidelizar nuevos clientes).
Desde un punto de vista estratégico y operativo, permite a la empresa hacer un balance de su enfoque de RSE así como de su gobernanza. Esto facilita identificar más fácilmente los puntos a fortalecer con acciones concretas. El EINF permite medir con claridad sus resultados, analizar su impacto en la actividad de la organización y reorientar su estrategia si es necesario.
El EINF tiene un alcance definido: no todas las empresas están obligadas a presentarlo. Solo aquellas que cumplen ciertos requisitos de tamaño, facturación y número de empleados deben elaborarlo, lo que deja fuera a muchas pymes con impacto significativo.
Además, aunque su contenido está regulado, existen diferencias en la aplicación según cada país, especialmente mientras la Directiva CSRD sigue en proceso de transposición. Esto puede generar inconsistencias en la información reportada y dificultar la comparación entre empresas y sectores.
En cuanto a sus obligaciones y exigencias, el EINF debe incluir datos sobre sostenibilidad, derechos humanos, diversidad y anticorrupción, pero el nivel de detalle varía según la empresa.
Algunas cumplen solo con los mínimos exigidos, mientras que otras van más allá y ofrecen información más completa.
Sin embargo, la falta de criterios uniformes puede dar lugar a informes poco comparables o con información difícil de verificar. Además, su elaboración implica un esfuerzo administrativo y económico que no todas las empresas están preparadas para asumir.
El Estado de Información No Financiera (EINF) tiene varias obligaciones que las empresas deben cumplir para garantizar transparencia en su impacto ambiental, social y de gobernanza (ESG). Estas obligaciones están reguladas actualmente por la Ley 11/2018, pero evolucionarán con la transposición de la Directiva CSRD.
La presentación de informes extrafinancieros es una obligación legal para un determinado número de empresas.
Están obligadas aquellas que sean empresas de Interés Público (EIP), con excepción de las empresas que reciban la consideración de pequeñas y medianas empresas, o si durante dos ejercicios consecutivos a la fecha de cierre de cada uno de ellos, reúnan al menos una de las siguientes condiciones:
Las de menos de 250 empleados tienen la opción de elaborarla igualmente al tratarse de una herramienta de comunicación corporativa con un impacto muy positivo.
En todos los casos donde existe la obligación de presentar el informe, este deberá ser aprobado en junta de accionistas y auditado por una agencia externa de verificación antes de su publicación. Además, deberá ser accesible de forma gratuita para el público a través de la página web de la compañía.
Para presentar un informe extrafinanciero completo, las empresas deberán mencionar el modelo de negocio, los riesgos, los indicadores asociados y alcances así como las políticas de diligencia para las siguientes cuatro categorías de información:
¿Qué información debe incluir? El EINF debe detallar el impacto y las políticas de la empresa en áreas como:
¿Cómo debe presentarse? Debe incluirse en el informe de gestión o en un documento separado.
La presentación de informes extrafinancieros forma parte hoy de la rutina de muchas empresas. Lejos de ser solo un requisito regulatorio, el EINF aporta valor real a la organización.
Mejora el acceso a financiación, refuerza la confianza de stakeholders y abre puertas en el mercado, especialmente con multinacionales que ya lo exigen a sus proveedores. Además, en un mundo donde la inversión sigue criterios ESG, contar con un EINF sólido es una ventaja competitiva clave.
Debido a la complejidad que puede suponer para algunas empresas, es recomendable empezar a trabajar en el informe con la antelación suficiente. Teniendo en cuenta la cantidad de información que se debe recopilar, el desarrollo de los contenidos y edición del documento, resulta conveniente dejar un margen de tiempo suficiente para la verificación externa.
Gesvalt cuenta con una división dedicada al área sostenible, con servicios vinculados a la financiación verde o certificaciones, venta de activos de compañías inmobiliarias, estudios medioambientales o nuevos requerimientos normativos, y está orientada a cubrir las necesidades de las empresas y administraciones, que necesitan acreditar su actividad como sostenible.
